El curioso incidente del perro a medianoche es una novela que se parece a ninguna otra. Elegiada con entusiaso por autores consagrados como Oliver Sacks e Ian McEwan, ha merecido la aprobación masiva de los lectores en todos los países donde se ha publicado, además de galardones como el Premio Whtibread y el Premio de la Commonwealth al Mejor Primer Libro.

Su protagonista, Christopher Boone, es uno de los más originales que han surgido en el panorama de la narrativa internacional en los últimos años, y está destinado a convertirse en un héroe literario universal de la talla de Oliver Twist y Holden Caulfield. A sus quince años, Christhoper Boone, conoce las capitales de todos los países del mundo, puede explicar la teoría de la relatividad y recitar los números primos hasta el 7.507 pero le cuesta relacionarse con otros seres humanos. Le gustan las listas, los esquemas y la verdad, pero odia el amarillo, el marrón y el contacto físico. Si bien nunca ha ido solo más allá de la tienda de la esquina, la noche que el perro de la vecina aparece atravesado por un horcón, Christopher decide iniciar la búsqueda del culpable.

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Es un libro muy original, me resultó una agradable sorpresa. Interesante intentar ver el mundo por los ojos de un autista.

RELEASE NOTES:

Para Sommer

Fue comentar en la cena que me interesaba leerlo y ya está en mis manos. Le tengo muchas ganas. Por tu préstamo y tu memoria: ¡Gracias Anx!

Muy bueno. Me parece una visión seria y realista de lo que supone la vida para alguien que padece autismo y también para los padres que se enfrentan al reto de sobrevivir a las rutinas férreas, las reacciones aparentemente inexplicables de este chico y al hecho de no poder tocarlo jamás. La ausencia de contacto físico es uno de los aspectos que me impresionan más; debe de ser muy frustrante tener que refrenar constantemente el impulso de abrazar a un hijo.
También me parece que Christopher es un verdadero héroe porque es capaz de renunciar a la seguridad de sus rutinas y enfrentarse a lo que más teme para ir con su madre. Vivir en ese estado de angustia constante tiene que ser agotador.

RELEASE NOTES:

Se lo devuelvo a Anx79. Muchas gracias por prestármelo. Me ha impresionado de verdad.

Cogido en la reunión del martes

Mark Haddon, autor de novelas infantiles, salta a la novela adulta con El curioso incidente del perro a medianoche, de la que también escribe una versión infantil. Y este navegar entre dos aguas está muy presente en la frescura e inocencia del libro, sobre todo porque el narrador es un niño autista de 15 años (Christopher), que por un desgraciado y trivial incidente decide jugar a los detectives.
Resulta curioso ver la realidad a través de los ojos y pensamientos de una persona autista que, por ejemplo, no comprende las metáforas, porque para él un signo linguístico representa exactamente lo que es, sin todos esos deslizamientos de sentido y juegos de palabras (el escritor que, en este caso parece ser el niño protagonista, intenta no utilizar metáforas en toda la novela).
También es divertido observar la lógica y los razonamientos que sigue Christopher, superdotado en matemáticas y al que todos consideran muy listo, aunque él se defina como sólo observador (en realidad, es hiperperceptivo, lo que le causa un sinfín de problemas). En un momento dice: “Ser listo es ver cómo son las cosas y utilizar la información para deducir algo nuevo”. Y él lo va a hacer, ya que una serie de descubrimientos le llevarán al fondo del misterio.
Mientras tanto, Christopher, ayudado por su profesora del centro de educación especial al que asiste, nos va revelando el entramado del libro a medida que lo escribe, lo que para él, como escritor en ciernes, constituye un ejercicio y para nosotros, que también nos gustaría serlo, una curiosa fuente de ideas. Aunque sus ideas sean las de un niño de 15 años.

Este libro sigue de mano en mano, ahor alo voy a leer yo. Gracias por el préstamo, anx.

Un libro precioso, lleno de ternura. Transmite de forma tan gráfica los sentimientos de Christopher que cuando describía su pánico a grupos grandes de personas (por ejemplo, en la estación de tren y luego en el metro), yo también me agobiaba.
Y la paciencia necesaria de los cuidadores y los padres, que a veces se ven sobrepasados por los "extraños" comportamientos del hijo. Y coincido con sommer, qué duro debe ser no poder mostrarle el cariño mediante el contacto físico, que él rechaza.

Recibido en mano de Biosbardo, ya lo leí en inglés y me encantó, así que tengo ganas de pegarle una nueva revisión

De vuelta en mi estantería después de viajar un poco por Galicia.

Se lo pedí en préstamo a Anx porque le tenía ganas y debo ser de las pocas personas que no lo he leído aún.....

Genial!! Me ha encantado esta historia!! Sobre todo la lógica con que lo ve todo...es increíble!! No sé porqué pero lo de Wellington ya me lo imaginé al principio...una que es bruja!!

Muchas gracias por el préstamo Anx, enseguida te lo haré llegar!!